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Con un arma poderosa, la oración
Acompañados del lema “Señor convierte nuestros corazones”, la jornada contó con bloques continuos de Adoración Eucarística entre las 8:30 y 19:00 horas, en que 23 comunidades de 17 diócesis chilenas rezaron por turnos de media hora ante el Santísimo Sacramento del Altar y expresaron mediante el rezo del santo Rosario, meditaciones y canciones, la reparación espiritual y una súplica a Dios para liberar a Chile del aborto y la eutanasia.
Comunidades de Santiago rezaron por la vida
En la Región Metropolitana, parroquias de las zonas del Maipo, Norte y Oriente representaron a la arquidiócesis de Santiago en esta gran cruzada y suplicaron a Dios por el futuro de nuestro país. En cada momento, sacerdotes y laicos reflexionaron sobre el valor de la vida, rezando los misterios del santo Rosario.
La parroquia Santa Gema Galgani de Ñuñoa, fue la comunidad que inició esta jornada y en su reflexión, el párroco Carlos Cano, aseveró que “todos estamos preocupados por la posibilidad que puedan ser aprobadas estas leyes. Por eso, humildemente desde nuestras comunidades, queremos elevar a Dios una oración intensa junto a la Virgen, para pedirle al Señor que los legisladores de nuestro país no caigan en esta tentación”.
En tanto, el padre Rodrigo Magaña, vicario de la Zona Maipo y párroco de Santa Teresa de Los Andes, en Puente Alto, centró su reflexión en torno a la fragilidad humana, que en muchas ocasiones no deja espacio para el amor. “El problema de Chile no es maldad, es ceguera, es el engaño del demonio que nos tiene metidos, como si la muerte de Jesucristo no valiera nada. Como si el sufrimiento con Jesús no hubiera adquirido un nuevo valor y sentido”, subrayó.
Por su parte, el párroco de las comunidades de San Bruno y Santo Domingo Guzmán de Ñuñoa, padre Michaell Duarte, guió la Adoración Eucarística, implorando “que el Señor convierta nuestros corazones, y pidiéndole a Jesús Eucaristía que se manifieste en un Chile sin aborto, sin eutanasia; orando y pidiendo por todos aquellos hermanos que toque el corazón, y que su presencia eucarística alcance cada una de las realidades que tenemos como sociedad”.
Reparación y adoración
En tiempos donde la discusión del aborto y la eutanasia han marcado la agenda legislativa en las últimas semanas en nuestro país, Misión Fátima Chile ha querido invitar a los fieles a acoger el llamado que realiza la Virgen María y consagrar nuestro país a su inmaculado corazón.
“El Papa Francisco y nuestros obispos han advertido reiteradamente que el aborto, la eutanasia y otros semejantes que atentan contra la vida, son actos intrínsecamente malos en toda ocasión y circunstancia. Por ello urge que los católicos nos unamos pidiendo a Dios perdón por estas graves ofensas y suplicarle que libre a Chile de estos males”, señaló Andrés Giménez, integrante del equipo de Misión Fátima Chile.
Fuente: Iglesia de Santiago.
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