Ayudando a refugiados de Siria

A través de la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia que Sufre, la Parroquia Inmaculada Concepción ha colaborado para mejorar la situación que afecta a refugiados de Siria.

Continuamente la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) recibe llamados para acudir en apoyo de cristianos en todo el mundo. Este año ha sido especialmente urgente hacer frente a las necesidades de cuidado, salud, alimentación y otros, de personas refugiadas en Siria y países vecinos. Ante esta realidad nuestra comunidad parroquial ha querido estar presente a través de una donación que permita contribuir al bienestar de estos hermanos.

De acuerdo a la información transmitida por la Fundación, la situación que afecta a nuestros hermanos sirios es particularmente grave debido a la lucha armada y al mal estado de los abastecimientos, en Siria las personas carecen literalmente de todo; las temperaturas invernales agudizan aún más la situación. "Los cristianos de Siria viven con miedo. La tensión es casi insoportable: los cristianos de Siria no tienen perspectiva alguna; el futuro en su propio país es incierto y buscan el apoyo de la Iglesia. Por eso es importante distribuir las ayudas a través de estructuras eclesiales", señala el Padre Andrzej Halemba, encargado de AIS en la región.

Informes del Vaticano señalan que más de 500.000 personas han huido de Siria; los campos de refugiados en Líbano y Jordania están luchando para hacer frente a la afluencia de personas y necesitan más ayuda. Según estimaciones, el número de personas necesitadas de ayuda en Siria asciende actualmente a cuatro millones.

La parroquia Inmaculada Concepción agradece el permanente apoyo de sus feligreses, lo que nos permite colaborar contribuyendo a mejorar las condiciones de vida de nuestros hermanos.