¡Prepara tu corazón para Pentecostés!

5 consejos pensados en ti

¡Quedan solo 10 días para celebrar esta hermosa fiesta que se reconoce como el segundo domingo más importante del año litúrgico!

Este día los cristianos tenemos la oportunidad de vivir con intensidad, la relación que existe entre la Resurrección de Cristo, su Ascensión y la venida del Espíritu Santo.

El Paráclito llega con sus 7 dones: sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios; para llenarnos de la gracia del Señor.

Acá te entregamos 5 tips recibir estos dones y hacer que esta fiesta de Pentecostés sea única:

1. Abre tu mente y tu corazón a la acción del Espíritu Santo

Permítele que obre en ti, rogándole (desde este momento) que te haga apóstol fiel de Cristo en el mundo. Intenta renunciar a una visión corta y estrecha que no te permite ver lo que Dios quiere para ti y déjate iluminar e instruir por la acción del Espíritu Santo. ¡No te arrepentirás!

2. Sirve a tus hermanos

Los dones del Espíritu Santo estarán disponibles para todos aquellos que, en oración, busquen recibirlos. Por ello, aprovecha esta maravillosa oportunidad de evangelizar a ese hermano alejado de la Iglesia o a esa hermana que no quiere saber nada sobre la fe, ¡se llevarán muchas sorpresas en sus corazones!

3. Sé un verdadero testigo del Evangelio en el mundo

Como preparación para Pentecostés, busca vivir el Evangelio preguntándote: ¿Esto lo hubiera hecho Jesús? ¿Qué decisión hubiera tomado en esta situación? Ponte en los zapatos de Cristo, para estar más abierto a ver con sus ojos. Estando en esta sintonía, comprenderás mucho mejor los dones que Dios quiere regalarte.

4. Renueva tu esperanza en Dios

Por un momento, deja a un lado tus propios motivos, planes o proyectos y recuerda que tu esperanza está en un propósito mayor: la Vida Eterna. El día a día nos lleva por muchos rumbos y a veces, tendemos a perder la perspectiva. Por ello, en preparación a recibir los dones del Espíritu Santo, date la oportunidad de enfocarte en la meta última: la salvación. Y buscándola, ahora sí retoma tus planes.

5. Refuerza tu fe

Reza mucho. En familia, en pareja, con amigos o solo. La oración es un diálogo continuo con Dios, Uno y Trino. Por tanto, te invitamos a hablar con Él, como nuestro Padre que es. Cuéntale tus dolores y los deseos de tu corazón, permítele saber cuánto ansías que su Espíritu esté presente en ti y en tu vida. Además, puedes pedirle que te otorgue aquel don que consideres que es el que más necesitas. (1)

¡Proponte poner en práctica al menos uno de estos consejos, y preparar tu alma para recibir al Paráclito!

(1) CatholicLink.